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Receta de Knödel: las famosas albóndigas de patata alemanas

Tiempo de preparación

30 min

Tiempo de cocinado

20 min

Tiempo total de cocinado

50 min

Número de comensales

4

Tipo de plato

Acompañante

Especialidad de

Alemania

4.4
(14)

Hoy os traemos al blog una receta que ha deleitado los paladares de generaciones en Alemania: las famosas Knödel o Klöße. Estas esponjosas y sabrosas albóndigas de patata alemanas son un acompañamiento perfecto para una enorme variedad de platos alemanes, como el Sauerbraten, las costillas de cerdo y otros guisos tradicionales.

Prepárate para disfrutar de una experiencia culinaria auténtica y reconfortante con esta receta de Knödel tradicional.

Cómo preparar Knodel: albóndigas de patata alemanas

  1. Comienza pelando y lavando las patatas. Ralla las patatas finamente y colócalas en un paño limpio. Exprime el exceso de líquido de las patatas ralladas para obtener una textura más seca. Reserva las patatas exprimidas en un bol grande.
  2. En otro recipiente, corta el pan en trozos pequeños y vierte la leche caliente sobre él. Deja que el pan se empape durante unos 5 minutos hasta que esté suave y esponjoso. Luego, exprime el exceso de leche del pan y agrégalo al bol con las patatas ralladas.
  3. Añade los huevos, la harina, la sal y la nuez moscada a las patatas y al pan. Mezcla todo muy bien hasta obtener una masa homogénea y ligeramente pegajosa.
  4. Con las manos ligeramente engrasadas con mantequilla, forma bolas grandes con la masa y colócalas en una superficie enharinada. Si encuentras que la masa está demasiado húmeda para manejar, agrega un poco más de harina.
  5. Lleva una olla grande de agua con sal a ebullición. Con cuidado, introduce las albóndigas en el agua hirviendo y reduce el fuego a medio. Cocina las albóndigas durante unos 15-20 minutos o hasta que floten en la superficie.
  6. Retira las albóndigas cocidas con una espumadera y colócalas en un plato.

¡Es así de sencillo! Ya tienes unas deliciosas Knödel listas para acompañar tus platos alemanes favoritos. Puedes servirlas con estofados, salsas o incluso solas con un poco de mantequilla derretida. ¡Buen provecho!

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