Tiempo de preparación
20 min
Tiempo de cocinado
30 min
Tiempo total de cocinado
50 min
Número de comensales
4
Tipo de plato
Entrante
Especialidad de
La Spargelsuppe es una receta clásica y deliciosa de la gastronomía alemana, especialmente apreciada durante la temporada de espárragos, que en Alemania se celebra con una auténtica devoción. Este tipo de sopa alemana, suave y cremosa, destaca por su sabor delicado, que realza todo el potencial de los espárragos blancos, una de las variedades más icónicas de la cocina germana.
Ideal para los días fríos o como entrante en una comida elegante, la sopa de espárragos alemana tiene una textura sedosa que encanta tanto a los paladares más exigentes como a aquellos que simplemente buscan un plato reconfortante.
El uso de ingredientes frescos y la sencillez en su preparación hacen de esta receta una opción perfecta para cualquier ocasión. La combinación del caldo suave, la mantequilla y las yemas de huevo, unida al toque ácido del vinagre y el limón, consigue una sopa equilibrada y llena de sabor.

Además, los espárragos, además de ser sabrosos, son un alimento lleno de beneficios para la salud, convirtiéndola en una opción nutritiva que cuida del cuerpo sin renunciar al gusto. ¡Vamos a prepararla!
Receta de sopa de espárragos (Spargelsuppe) paso a paso
- Preparación de los ingredientes: Lava y pela los espárragos blancos. Recuerda que los espárragos de buena calidad, especialmente los alemanes, tienen una piel fina que no es necesario eliminar por completo, solo raspar un poco la parte inferior. Corta los espárragos en trozos de unos 3 cm, reservando las puntas para una presentación más elegante si lo deseas. Pela la zanahoria y córtala en rodajas finas, y pica la cebolla en trozos pequeños.
- Cocinar las verduras: En una olla grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Añade la cebolla picada y la zanahoria. Sofríe durante unos 5 minutos, hasta que la cebolla se vuelva transparente y la zanahoria empiece a ablandarse. No dejes que se dore, ya que la sopa debe mantener un color claro.
- Añadir los espárragos: Incorpora los espárragos troceados a la olla. Remueve bien para que se impregnen con la mantequilla y los sabores de la cebolla y la zanahoria.
- Espolvorear la harina: Espolvorea la cucharada de harina sobre las verduras y revuelve bien para que se mezcle. Esto ayudará a espesar la sopa. Cocina durante un par de minutos para que la harina se integre sin que pierda su sabor crudo.
- Agregar el caldo: Vierte el caldo de verduras (puedes utilizar un caldo casero o uno comercial de buena calidad). Aumenta el fuego hasta llevarlo a ebullición. Una vez que empiece a hervir, reduce el fuego y deja cocer a fuego lento durante unos 15 minutos, o hasta que los espárragos estén completamente tiernos.
- Triturar la sopa: Una vez cocidos los espárragos y las verduras, utiliza una batidora de mano para triturar la sopa hasta obtener una textura suave y cremosa. Si prefieres una sopa más ligera, puedes añadir más caldo o agua para ajustarla a tu gusto.
- Añadir la nata: Incorpora la nata líquida a la mezcla y revuelve bien. Deja que se cocine unos 5 minutos más a fuego bajo, para que los sabores se integren.
- Temporada y ajuste de sabor: Añade sal, pimienta blanca, azúcar, vinagre y zumo de limón al gusto. El vinagre y el limón aportan el toque ácido que equilibra la dulzura de los espárragos. Remueve bien y prueba para ajustar la sazón.
- Añadir las yemas de huevo: En un bol aparte, bate ligeramente las dos yemas de huevo. Con la sopa ya fuera del fuego, añade las yemas batidas en un hilo, removiendo rápidamente para que no se cocinen. Esto le dará una textura aún más cremosa y un sabor delicado.
- Servir: Sirve la sopa caliente, decorando con las puntas de espárrago reservadas y unas hojas de perejil fresco. Si te gusta el pan, acompáñala con una rebanada de pan alemán crujiente, ideal para mojar.
En muchos hogares alemanes, la preparación de esta sopa es una tradición durante la temporada de espárragos, conocida como «Spargelzeit«. Durante este periodo, los espárragos blancos se venden en mercados locales y supermercados, y las familias se preparan para disfrutar de este manjar en diversas formas.
Los espárragos alemanes son especialmente conocidos por su calidad y sabor, debido a las condiciones ideales de cultivo en regiones como Baviera y Renania del Norte-Westfalia. En Alemania, los espárragos son un producto de prestigio, y existen numerosas festividades y ferias dedicadas a su cosecha y consumo. Si alguna vez tienes la oportunidad de visitar Alemania durante la temporada de espárragos, no dejes de probar la Spargelsuppe en su versión más tradicional.
En cuanto a la versión de la receta, puedes personalizarla a tu gusto, añadiendo ingredientes adicionales como trozos de jamón o un toque de vino blanco. La Spargelsuppe también puede servirse fría en verano, convirtiéndose en una sopa refrescante que puedes disfrutar durante los calurosos días de la estación. Recuerda que la clave de esta receta está en el buen uso de los espárragos frescos y la crema, lo que le dará una textura perfecta.
Si te ha gustado la Spargelsuppe y te gustaría seguir explorando la deliciosa cocina alemana, te invitamos a descubrir más recetas tradicionales como el Wiener Schnitzel o el Kartoffelsalat. Además, si eres un amante de la gastronomía alemana, no dudes en explorar nuestros productos gourmet alemanes como mostazas, salchichas alemanas, o los famosos pretzels.
Los ingredientes auténticos marcan la diferencia y garantizan que disfrutes de la mejor experiencia culinaria en casa.